LI - Quest 2

[i]Apenas entraste te percataste de la oscuridad del pasillo, además de que era estrecho y te costaba respirar por la falta de aire del lugar, no podías ver más allá de un par de pasos frente a ti (y si estas con un compañero, incapaz de ver algo por la falta de luz, solo escuchas sus pasos). Mientras el grupo sigue caminando, de repente se detienen al oír un crujido. No tardas en realizar que el suelo a tus pies se resquebraja en tu peso, antes de que puedas correr, sientes cómo el piso te abandona y no logras afirmarte a nada (sólo a tu compañero, si decidiste hacer party tu voluntad permite llevarlo contigo en la caída). Logras caer con tus pies, sin perder la dignidad, mientras con tus manos tratas de dispersar el polvo a tu alrededor.

Caíste en una gran cámara con extraños jeroglíficos en las murallas, brillando con un rojo furioso, cuyo origen no quieres saber, pero puedes oler la sangre en la habitación. La ligera iluminación proporcionada por el líquido en los jeroglíficos entre cada pilar es suficiente para que puedas ver a la bestia frente a ti, la que brilla de la misma manera en el centro de su cuerpo, pero más tenue

Al percatarse de tu presencia aquella bestia ruge de ferozmente, haciendo que pequeños trozos de aquel antiguo templo caigan. Estas asustado pero decides pelear (con tu compañero lo deciden en un silencio cómplice) contra aquella bestia con deseos de matarte, ya que puedes ver que la salida está tras aquella criatura. Tras cruzar la puerta podrías buscar algún tipo de escalera que te lleve al primer nivel nuevamente.[/i]


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Entró cuidadoso al pasillo, podría decirse que estaba tan acostumbrado al peligro que casi tenía un sexto sentido que le permitía percibirlo, gracias a dios tenia excelente visión en la oscuridad…pero esta oscuridad era extraña.

Sintió el piso abandonarlo, lanzo una carta con la cual pudo lanzar viento para aminorar la velocidad de la caída y caer de pie como buen gato. Inmediatamente sintió el familiar olor de la sangre, pero la esencia era de humanos muertos en este lugar. De sus pensamientos vio todos los símbolos y jeroglifos de la habitación encenderse y empezó a distinguir una silueta…una muy grande.

-Que mierda … -susurro para sí, atento a los movimientos de lo que se avecinaba, no tuvo que esperar demasiado pues una gran mano con garras de igual tamaño se lanzo hacia él, justo a tiempo salto impulsándose esquivándola por milímetros de distancia. Escucha un rugido que lo hace dirigir su atención a la gran bestia en el medio del cuarto, que brillaba igual que los jeroglifos de la pared, no tuvo demasiado tiempo de contemplarla, pues esta lanzo de nuevo sus garras enérgicamente hacia el, esquiva una, pero la otra lo lleva hacia la pared con gran fuerza, siente un “crack” dentro de sí, pero por ahora le resta importancia.

La inmensidad de la bestia contra su ser le dio una idea. Al siguiente manotazo del monstruo se encamara entre los dedos de esta y corre el brazo, saca una de sus cartas y corre por su brazo recorriendo con la punta de la carta la piel de la bestia, pero parecía no pasar nada…parecía. Sube hasta el hombro con esfuerzo, saltando por sobre la boca que trataba de convertirlo en su víctima, rasgándole un “poco” de la piel del brazo en el proceso y salta, lanzando unas cuantas cartas a gran velocidad, que al principio tampoco parecían hacer nada al rato las heridas anteriores y las nuevas empezaron a sangrar, el manchándose de esta sangre y confirmando que era el momento. Rebota contra el monstruo varias veces, aprovechando de cortarlo más y al llegar a la altura correcta se prepara para su ataque.

Suelta de sus bolsillos escondidos mazos de cartas, manchados de sangre suya y de la bestia, las cartas caían en caída libre junto a él, pero en un momento para, quieto en medio del aire, las cartas revolotean a su alrededor cada vez más rápido como un remolino, el monstruo trata de atacarlo pero era como si un escudo invisible protegiera a la pantera, repeliéndolo, era tal la fuerza que los pedazos restantes del “piso” caían. Nataraj parecía tener una expresión extremadamente serena, a ojos cerrados, concentrado del movimiento de las cartas, estas se reagrupan tras de el y toma dos en cada mano, y al lanzar estas, todas las cartas agrupadas tras el salen cual alas de ángel hacia el monstruo en una velocidad demoniaca y lo cortan, todas en diferentes lugares, las cartas lanzadas por su mano se dirigieron hasta el centro del monstruo cortándolo gravemente, en el instante en que empieza la caída libre de Nataraj ve la salida tras el monstruo, y la caída de este hacia su dirección.

Salta sobre la boca del monstruo y corre lo más rápido que puedo, usando el cuerpo como puente hacia la salida, Pero el monstruo se levanta y gira para verlo directamente…y cae finalmente en un charco de sangre, ahora convertido en uno con los antiguos restos, muerto por desangramiento masivo.
Nataraj se sonríe y va hacia el primer piso para salir. No puede saber exactamente cuánto tiempo peleo debido a la eterna noche de lumina, pero está seguro que fueron horas. Y siente un intenso dolor en el brazo izquierdo, el crack que sintió ante ser estampado contra la pared, sus ganas de gritar eran insoportables pero apretó sus dientes y sufrió para sí.

- Así es mi rey Arpad, encontré muchos soldados muertos, no me sorprende, era una bestia gigante que los devoraba de un bocado, y sin la destreza física, y una habilidad para mantenerse en movimiento constantemente, era un plan infalible contra intrusos. – Se retira, manteniendo una falsa calma, sufriendo enormemente por su brazo roto, y cree que incluso se lo disloco entre medio, además de las múltiples heridas con las cuales quedo.

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Lo termine ayer pero escribi hoy XDDDDDD, la verdad es que lo hubiera subido antes, pero andaba con un dolor de espalda y cabeza horrible.....xDDDDD

yo imaginaba a la bestia hacia gigante, asi que la hize grande

Y si, Nat kedo pa la cga, wn k fue solo de choro no mas XDDD pero no se va a andar quejando del dolor obviamente.

No se pk pero Nat tiene pinta de pegarse spellcards a lo touhou. Sus cartas cortan por la fuerza del viento por sia...es como el agua que a velocidades y fuerza adecuadas puede cortar metal.